El Observatorio Regional de Equidad en Salud se une al Núcleo de Ciencias Sociales

El Núcleo en Ciencias Sociales suma un nuevo aliado a su quehacer científico tecnológico. Se trata de la incorporación del Observatorio Regional de Equidad en Salud según Género y Pueblo Mapuche.

Actuar como un facilitador entre la sociedad civil y las instituciones del Estado es el principal rol del Observatorio. Para ello realiza seguimientos, evaluación y control de las políticas públicas, evidenciando las inequidades en salud desde la perspectiva de género e interculturalidad en diferentes campos de observación, todo esto con el apoyo de una red conformada por organizaciones de mujeres mapuche y no mapuche de la sociedad civil y académicas de diferentes unidades de la UFRO.

“En un trabajo conjunto efectuado con mujeres mapuches y no mapuches de la sociedad civil organizada planteamos cinco campos de observación en salud que consideramos relevantes: medioambiente, violencia de pareja, salud sexual, calidad de la atención en salud y salud mental”, explicó.

Todas estas variables hasta hace 20 años estaban completamente invisibilizadas y desde la academia fue que estos temas se pusieron sobre la mesa y así entrar a discutir con las autoridades pertinentes qué es lo que se podía hacer y mejorar.

“Como observatorio hemos levantado informes y muchas de nuestras fuentes han sido siempre los datos que las mismas políticas públicas van arrojando”, dijo la directiva. “Es así como año a año, con estos insumos, tratamos de posicionar en el concierto regional temas que son de especial importancia para hombres, mujeres y niños; en definitiva familias completas, para así poder establecer conversaciones con las organizaciones que están a cargo, especialmente en temas de salud, lo que incluye normas sanitarias, contaminación, ubicación de vertederos, etc.”

Es en definitiva el monitoreo a las autoridades pertinentes para asegurar la salud de los ciudadanos, con una mirada más amplia, vinculada al buen vivir y a la integralidad de las personas.

Influencia

Desde su puesta marcha, el Observatorio ha logrado situar temas en la discusión regional, generando algunos avances a partir de movilizaciones ciudadanas, ya que el Estado no actúa solo, sino que se debe a las demandas de sus ciudadanos y en ese sentido, debe responder. Un ejemplo claro fue la puesta en evidencia de la violencia de género; fenómeno que había sido silenciado por décadas y que aún hoy se empina como un tabú dentro de la sociedad chilena. “Aquí nosotros como observatorio podemos constatar que prevalecen miradas que se entrecruzan con las cultura, que hay códigos no explorados, pero que también hay avances y que se han visto reflejados en la salud mental de hombres, mujeres y niños”.

Rol y aportes al Núcleo

En este sentido, el rol del Observatorio ha sido transparentar problemas sociales y que con las capacidades que ofrece la academia, los actores involucrados se hayan empoderado y así tener las herramientas para instalar diálogos que permitan conversar con las autoridades de manera más sustentada, con evidencias y datos. “Esta es la única manera en que se pueden elaborar políticas adecuadas para la realidad de la región de La Araucanía”, dice Ketterer. En ese sentido, el aporte del observatorio al Núcleo radica en seguir levantando información y así aportar evidencias que puedan dar cuenta de los problemas sociales de la región. “A veces las Ciencias Sociales también se alejan de la realidad y nuestro enfoque de acción participativa es fundamental para volver a la esencia, porque trabajamos con personas y junto con ellas buscamos el conocimiento necesario que pueda aportar al mejoramiento de su calidad de vida, siempre incluyendo el enfoque intercultural”.